Muchos comentaristas dedicaron ayer sus columnas en los distintos periódicos, a la situación de corrupción por la que está atravesando España. Corrupción que afecta a políticos de distintos partidos entre ellos a los de los dos mayoritarios, es decir, PP y PSOE. Hay un diario que en su portada publica un mapa de España señalando las localidades en las que se han dado casos de ella y da pena verlo. He contado 34 de éstas distribuidas entre la península y los archipiélagos. Son muy pocas las Comunidades Autónomas que se salvan de tener algún caso. Esto no puede seguir así, porque de hacerlo nos cargamos la Democracia que con tanto esfuerzo y generosidad se consiguió en la Transición, como ya he comentado en otras ocasiones.
Si se tratara de algún caso aislado, la solución sería fácil, simplemente con cortar en seco el foco de corrupción el problema terminaría, pero no, como acabo de decir, se extiende por todo el territorio nacional y entre personas de distintos partidos políticos, entre ellos de los dos grandes. Y son precisamente éstos los que se tienen que mojar y resolver la situación de forma tajante. Es necesario, pues, un pacto entre los dos partidos mayoritarios.
José Mª. Carrascal es uno de los columnistas que se refieren a ella y en su columna en ABC, del día uno de noviembre, dice al final del artículo que la solución es muy simple, basta con reformar la financiación de los partidos y de los ayuntamientos.
Pero como esta reforma la tienen que hacer los políticos, pienso que es imprescindible que los dos grandes lleguen a un pacto que les permita imitar a Ramiro II el Monje y corten las cabezas (en sentido figurado, se entiende) de los sinvergüenzas que nos han estado robando a todos los españoles y manchando el buen nombre del resto de sus compañeros para enriquecerse ellos.
Y como yo sostengo que la Filosofía sirve para resolver situaciones de la vida diaria, sugiero a los responsables de los principales partidos políticos, que se fijen en Platón, no para hacer un Estado, exactamente igual al que el propone en su obra La República, sino para vigilar bien las propiedades de los políticos, exigiendo con seriedad una declaración de bienes al comenzar su mandato ya sea éste como Alcalde, Concejal, Diputado o Ministro. Y comprobar con el mismo rigor los que tiene cuando abandone el cargo, que no deben variar mucho. El político tiene su sueldo y se presenta al cargo de forma voluntaria para servir al pueblo, no para hacerse rico. Si quiere esto último que monte un negocio, pero que no se dedique entonces a la política.
Platón decía que los gobernantes y los guardianes no podían tener propiedades privadas. Éstas estaban reservadas únicamente al pueblo. De esta forma se evitaba la corrupción en el Estado. Decía también el filósofo griego que para que todos los estamentos puedan convivir de forma pacífica en el Estado debe reinar la justicia que no es otra cosa que cada uno cumpla con su obligación, así de simple. Y es que para resolver los problemas no hacen falta complicaciones rebuscadas que solamente consiguen enmarañar más las cosas, sino imitar también a Occam que, entre otras cosas decía: Entia no sunt multiplicanda praeter necessitatem ( no hay que multiplicar los entes sin necesidad) y Pluralitas non est ponenda sine necessitate ( no hay que admitir la pluralidad sin necesidad). Es decir, no complicar las cosas sino ir directamente al grano.
Pues que mutatis mutandis, hagan eso los señores Rodríguez Zapatero y Rajoy Brey. Y si no saben o no quieren que dejen a los que sepan y quieran que lo hagan, porque no se puede permitir que políticos corruptos se carguen el Estado Democrático que disfrutamos.
En mi libro Facilosofía (Edición revisada y ampliada de Ediciones Absalon) puede encontrar el lector interesado más información sobre las Teorías de Platón y de Guillermo de Occam, así como las aplicaciones prácticas de las mismas a la vida diaria.
Juan, quería enviarle un saludo y felicitarle por su página web; contiene artículos y reflexiones muy interesantes. Asimismo le invito a que de vez en cuando le eche un vistazo a uno de mis blogs, del cual ya le hablé, Cerezas y Guindas. Espero que le guste.
ResponderEliminarBelén.
Hola Belén: Gracias por tus comentarios. Claro que visito tu blog; entro en él con frecuencia y me parece muy bueno. Te habrás fijado que lo tengo en el mío como una de las páginas favoritas. Un saludo cordial.
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